CHICOS TIERNOS

Ayer, en el coche de vuelta del trabajo, nos encontramos un atasco horrible.
De repente, mi chico me pone la mano en la barriga, sin decir nada. Le miro, me pone la mano en un pecho (sin lujuria eh?) y entonces me pregunta:
- Han crecido?
Y yo: - no.
El: - tendrían que crecer?
Yo: - Pues no lo sé, no creo.
El: - y te has mareado o algo?
Yo: - no, por? tendría que marearme?
El: - es que estoy esperando el momento que te pongas mala, te marees y vomites. Entonces ya será.
Yo: - mi amor, todavía es pronto, hasta después de la falta no se suelen empezar a notar los síntomas.
El: - vale.

Vease que en ningún momento nombra embarazo, posible embarazo, pequeñines ni cosas de esas. Pero, de repente me he visto yo tranquilizándole a él. Increíble! Yo era antes la histérica, jeje.

Yo siempre he pensado que las cosas ocurren por algo. Que si algo malo sucede, algo mejor me está esperando. Así cuando me separé, me di cuenta, después del duelo, claro, que lo mejor estaba por venir. Igual con perder algún trabajo interesante o cualquier otro disgustillo que me haya podido llevar.
Pero cuando nos dieron la noticia en la clínica, no le veía ninguna explicación a esto. Por qué ocurre esto? No he sufrido ya bastante? Qué cosas buenas puedo sacar de esta experiencia?
Pues ahora, con el tiempo, me he dado cuenta que sí. Todavía no tengo mi positivo, y no sé si lo conseguiré. Pero he conseguido sacar la parte más tierna de mi chico. En ocasiones he dudado que él pudiera estar a la altura en momentos duros, por su frialdad. Pensaba incluso que me dijo que sí a buscar niños para que me callara, y le dejara en paz y que jamás se implicaría, que sería mi problema.
Y, afortunadamente, he descubierto que estaba muy equivocada. Tengo a mi lado una persona maravillosa, que se preocupa, se implica y me adora. Además, de que tiene sus sentimientos, cada vez menos escondidos. Es un estupendo compañero de viaje para esta vida dura, con o sin niños.
Así que esta lotería ya la he ganado.
Buen finde!!